Caminatas de Verano II

La semana del 19 al 25 de julio estuve de vacaciones, así que me fui 3 días al pueblo (Arriate) y cada día me hice una rutilla, el martes que fue cuando llegué, por la tarde salí con la bici, iba con el marido de mi prima he hicimos un recorrido que debía de tener unos 10km pero que por insistencia de mi acompañante se incrementó hasta los 18; más o menos fue Arriate-Huertas Abajo-Venta Pelistre-Venta El Polvorilla-La Fresneda-El Marqués-Cuesta de los cochinos (el Cerro de la Salina)-Cruce del Polear-Cuesta de los Cochinos (por el camino paralelo donde en el 2006 tan sólo bajaban las bicicletas y los de duathlon, y que ahora está completamente abandonado y por donde jamás volveré a pasar porque casi me caigo varias veces y tuve que ir bajado de la bici casi todo el recorrido)-Arriate. Yo la subida a los Cochinos la hice achuchando la bici menos dos restitas que había, y lo mejor fue el abrevadero con su fuente de agua fresquita y los sapos y ranas en el fondo mirando para arriba.
El día siguiente me levanté a las 6 y a las seis y media, aún de noche me fui a hacer el recorrido que había hecho un mes antes con la gente del Club Senderista Arriate y que lo tengo ya como uno de mis recorridos faboritos por lo bonito que es, a la salida de pueblo no me puede aguantar el estar un rato tirando fotos a la panorámica que hay desde las Casas Nuevas. El recorrido fue: Arriate-El Marquez-Cuesta de los Cochinos-Venta El Polear-Cruce carretera Setenil-Cortijo Las Monjas-Puente la Ventilla-Arriate.
El recorrido es muy facilito, la parte mas durilla es la Cuesta de los Cochinos, el resto es cuesta abajo o llanear, la luz del amanecer fue muy bonita y lo mejor de todo es la parte de la bajada hacia Arriate por La Ventilla, es como entrar en otro mundo, el río esta lleno de pozas donde te puedes meter (yo no lo hice), la vegetación es inmensa, la temperatura es varios grados más baja que cuando sales fuera de allí...., un pasote de ruta y que espero volver a hacer muchas veces más.
Lo parte peor fueron los inmensos perros que salieron a mi encuentro en el cortijo El Polear, yo le tengo pánico a los perros sueltos que vienen hacia uno ladrando (de chiquitillo tenía una fuerza singular que hacía que todos vinieran a mí y algunos me mordiesen), al final salio una señora y los llamó, desde ese momento en cuanto oía ladridos (cercanos o lejanos) me agachaba y cogía varias piedras, luego hubo más perros, pero estaban detrás de vallas, por eso decidí llevarme el bastón, un coñazo,porque no puedo tirar fotos tan cómodamente.
Bueno, mañana más.

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